La Ruta de la Costa Áurea está salpicada de vestigios que narran una época de esplendor tras la conquista romana de estas tierras, motivada por la explotación de los yacimientos de oro locales.
Exploraremos juntos esta fascinante ruta por la costa occidental asturiana.
RUTA DE LA COSTA ÁUREA
Localización: Concejos de Coaña, El Franco y Tapia de Casariego en el occidente asturiano.
,Aunque hay muchos vestigios de esta época en Asturias, nos centraremos en unos pocos que, a poca distancia entre sí, pueden ofrecerte una idea clara de este período histórico.
¿Cómo empezó todo?
Remontamos al año 19 a.C. momento en el que las legiones romanas avanzaron en la conquista de Asturias durante las Guerras Astur-Cántabras. Los romanos, al adentrarse en estas tierras, se encontraron con un territorio lleno de sorpresas. Había un brillo especial en los ríos y en los adornos de los nativos, un brillo que encendió la codicia romana. Era el oro, un tesoro que prometía riquezas inimaginables. Los habitantes de estas tierras llevaban collares y pendientes de oro, mostrando no solo su habilidad artesanal, sino también la abundancia del metal precioso en la región. La noticia del oro asturiano llegó a oídos de los gobernantes romanos y fue el detonante que llevó al mismísimo emperador César Augusto a liderar las tropas, obteniendo en estas tierras su primera gran victoria como emperador.
¿Cómo cambió la minería romana el paisaje Astur?
La llegada de los romanos transformó profundamente la escena paisajística de Asturias. Estos conquistadores, expertos en ingeniería y logística, tomaron el control de la minería local, asegurando así un suministro constante de recursos para su vasto Imperio.
En diversos lugares se aplicó la técnica conocida como «ruina montium», de efectos sumamente destructivos y que empleaba agua a alta presión para derrumbar grandes bloques de roca y facilitar la obtención del preciado metal.
- Minas -
¿Qué vestigios de la minería romana podemos visitar?
Hoy en día, aún es posible observar las cicatrices que está intensa actividad minera ha dejado en el paisaje asturiano.
Parajes con un atractivo singular, sin duda, son las Lagunas de Silva y las Cuevas de Andía.
Las Lagunas de Silva:
– Visita libre
Estas lagunas artificiales legado de la ingeniería romana, albergan hoy un paisaje singular, donde la naturaleza y la historia se entrelazan.
Un sendero serpenteante nos invita a adentrarnos en este refugio verde, donde la densa vegetación se cierra a nuestro paso, filtrando la luz del sol y creando una atmósfera de misterio. Bajo las tranquilas aguas de las lagunas, se estima que yacen cerca de 2 millones de onzas de oro.
Covas da Andía:
– Visitable- ⏩Información y reservas
Junto al pueblo que le da nombre, se encuentran las Cuevas de Andía. La búsqueda de oro en época romana transformó este enclave en un laberinto de explotaciones mineras y cuevas que hoy podemos recorrer.
Tras las huellas mineras, la naturaleza ha reclamado su espacio: un bosque frondoso y un arroyo cristalino dan vida a este Monumento Natural, reconocido en 2002 como un lugar de valor excepcional.
¡Por Tutatis! ¡Estos romanos no solo cambiaron el paisaje, sino también la vida de los asturianos!
El historiador Estrabón nos cuenta que en esos tiempos de conquista, en las regiones norteñas, vivían pueblos en castros, pequeñas aldeas fortificadas. Estas comunidades habían habitado la tierra durante siglos, construyendo sus hogares y obteniendo todo lo que necesitaban de su entorno o mediante el comercio con otros pueblos. La rivalidad entre grupos los llevó a levantar poderosas murallas para proteger a sus familias y pertenencias.
Con la llegada de los romanos las murallas de los antiguos poblados cedieron ante el poder implacable del Imperio. Los primitivos pobladores se adaptaron a una nueva realidad y convivencia que transformó su arquitectura, costumbres y estructura social. Esta influencia trajo consigo avances en técnicas agrícolas e infraestructuras, integrando a los astures en una sociedad más compleja y mejorando significativamente su calidad de vida.
- castros -
¿Qué castros o poblados astures-romanos podemos explorar?
Castro de Coaña
– Visitable- ⏩ Información y reservas
El más conocido y extenso de la región, edificado por los habitantes locales entre los siglos V-IV a.C. A lo largo de su historia, el poblado vivió un floreciente periodo bajo la influencia romana, transformándose en un vibrante núcleo urbano.
Estructura y Hallazgos: El Castro de Coaña presenta una compleja estructura que ha sido revelada a lo largo de casi doscientos años de excavaciones. Su configuración general incluye los siguientes elementos destacados:
- Situado sobre una colina y protegido por murallas y un foso, incluye un barrio habitado con más de 80 cabañas, una Acrópolis con una gran plataforma elevada, y un Recinto Sacro con edificios interpretados como saunas. Las excavaciones han revelado elementos arquitectónicos como cuerpos de guardia y pavimentos de pizarra, así como objetos domésticos como molinos y morteros.
Castro de Mohías
– Visita libre
- Asentado en una meseta estratégica, el poblado se encuentra resguardado por tres fosos tallados en la roca y una muralla que, aunque hoy casi imperceptible, denota su antigua importancia. Las excavaciones han puesto al descubierto cerca de veinte estructuras, desde humildes cabañas hasta edificios más elaborados, que revelan una ocupación continua desde la Edad del Hierro hasta la época romana. Se encontraron hogares, morteros de granito y abundante material cerámico, indicando una ocupación hasta los siglos I-II d.C. Este poblado aún sin terminar de excavar está declarado Bien de Interés Cultural en 2014
Castro de Cabo Blanco
– Visita libre
- Situado en la costa de la Asturias occidental, el Castro de Cabo Blanco se asentó estratégicamente sobre acantilados marítimos para aprovechar su defensa natural. Con una superficie de casi 6 hectáreas, es uno de los castros más grandes de la región. Inicialmente, durante la Edad del Hierro (siglos VIII-I a.C.), el área protegida se limitaba al cabo, pero en época romana se expandió hacia el continente, formando un vasto recinto. El castro ha sido excavado y vuelto a cubrir, ocultando sus antiguas edificaciones. Sin embargo, mientras paseas por el lugar, puedes imaginar la vasta fortificación bajo tus pies. El parapeto monumental, que aún se alza en algunas secciones conservadas, cuenta la historia de tiempos pasados, cuando sus imponentes defensas protegían a los habitantes del recinto.
- Pueblos -
¿Qué otros tesoros ofrece la Ruta de la Costa Áurea asturiana?
Con el tiempo, las imponentes murallas de estos castros dejaron de ser necesarios para la defensa, marcando el inicio de una transformación. Las aldeas, liberadas de sus antiguas limitaciones, se expandieron y florecieron, dando origen a pueblos y ciudades.
Lugares como Tapia de Casariego, Viavélez y Ortiguera, enclavados en parajes naturales de singular belleza, nos invitan a descubrir la verdadera riqueza de la región, una riqueza que trasciende el valor del oro.
¿Te animas a explorar esta fascinante ruta y descubrir la historia y belleza de Asturias?
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- Ayuntamiento del Franco- https://www.elfranco.es/
- Ayuntamiento de Tapía – https://www.tapiadecasariego.es/
- Fundación Parque Histórico del Navia – https://www.parquehistorico.org/
Recuerda:
- Asturias es un lugar mágico que te enamorará con sus paisajes, su gente y su gastronomía.
¡Buen viaje!
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